Tu Olor

domingo, 16 de mayo de 2010


Tan solo con olerte me pasan tantos recuerdos por mi mente y tengo que controlarme pues todo lo que deseo es mostrarte que soy más práctica que teoría… que puedo encontrar lugares en ti que nunca pensaste que podían ser placenteros.

Me quedare en tu sur hasta que me apartes, quiero que el momento de entrar en ti sea el que tu elijas.

Mientras quiero registrar tu olor en mi memoria para poderte localizar cada vez que estés cerca y deseosa, aparecer detrás de ti sin un sonido y hacerte mia.

Quiero taparte los ojos, darte mucho placer. Quiero ver si puedes tener un orgasmo con los ojos abiertos, mirándome a los ojos, quiero ver qué leo en esos ojos en esos momentos.

Ahora deseo alejarme un poco de tu cuerpo y ver como te tocas, tu mano se mueve hacia tu pecho y jadeas de lo excitada que te pones y empiezas a acariciarte tu seno izquierdo, apretando tu pezón entre el pulgar y el índice.

Luego de un rato veo que ya no quieres acariciarte los senos, así que recorres tu cuerpo lentamente con tus dedos. Bajas por tu pelvis y comienzas acariciar suavemente el prepucio de tu clítoris.

Abres las piernas un poco para darte más terreno y acaricias tus labios mayores, hinchados y tremendamente sensibles.

Mientras mantienes el ritmo, puedo ver como brota de ti ese jugo,ese néctar que tanto me gusta y que no me dejas disfrutar.

Te vas directo a acariciar tu clítoris erecto y mueves y aprietas, luego trazas círculos a su alrededor.

Esto va Subiendo el umbral de tu orgasmo cada vez más, ya no estás jadeando, estás gimiendo veo tus piernas y tu pelvis moverse más ritmicamente.

El jugo que chorrea te moja completa mente y tus dedos resbalan. Ahora quieres que seque con mi lengua tu jugo vaginal, que te mordisque las nalgas. Y enrede mi lengua en tu ombligo, en el pliegue de tus nalgas, en tu sacro y marque círculos en tus senos y en tu espalda.

Y mientras mi lengua conoce la tuya, y voy recorriendo tu nuca con mi mano, me pides que te empiece a penetrar, estás prácticamente quieta porque las embestidas de mi miembro lentas y profundas te mantienen en equilibrio, en el aire y mis manos masajean tus senos, tus brazos, probando, acariciando.

Te estás derritiendo de placer, puedo ver tu sonrojo hasta veo cómo la punta de tu lengua recorre tus labios y tu respiración aumenta, puedo sentir como tu ¨clítoris¨ se pone duro como una roca.

Con una mano toco tus pesones que poco a poco se endurecen y con la otra levanto tus nalgas para hacer cada vez mas profundas las penetraciones de mi pene, convirtiendo tu voz en jadeos y los quejidos en placer. que se te escapa del pecho a cada arremetida que te proporciono y que de manera repentina e inesperada te hace gritar mi nombre.

Mis huevos se impactaban con tus nalgas abiertas, empapadas por los jugos que de tu vulva escurrían, produciendo un sonido que simulaba un aplauso húmedo que por momentos se espacia en repetidas ocasiones para reanudar con mas intensidad y fuerza, llegando a sentir como mi miembro te roza las paredes internas cada vez mas lubricadas, entrando y saliendo a una velocidad que va incrementando y que te causa tanto placer.

Comienzas a perder el control de tu cuerpo, intentas cerrar las piernas, me abrazas con mucha fuerza, como queriendo que me introdusca mas dentro de ti. Jadeas, gritas y clavas tus uñas en mis manos, mi espalda y sin dejar de jadear me dices -yo soy tu santa, tu puta, tu cuero y tu mujer-.

Mi Mal Humor

domingo, 9 de mayo de 2010

0 comentarios  




Hay días que tu humor puede cambiar como cambia un semáforo de un color a otro. El viernes todo el día fue una maravilla; pero ya en la noche se me barajó una cita que tenía y eso me puso de mal humor, sin embargo unos minutos después ya la cosa iba cambiando un amigo me invito al teatro, le pregunte que si solo él y yo, me respondió que no; volví a preguntar que quienes más iban a ir y el solo dijo espera y veras.

Ya en el teatro veo que se acercan dos hermosas jóvenes, una de ellas yo ya la conocía era la novia de mi amigo pero la otra “era otra cosa” estaba buenísima: piernas largas y bien torneadas, un vestido muy cortos y provocativos apenas cubriendo un culo perfecto y voluptuoso, hermosas tetas, cuello largo y una cara entre inocente y perversa, de grandes ojos y labios llenos.

Una verdadera belleza, de esas que saben muy bien cómo usar sus dotes, y como presentarse en el mejor ángulo posible para resaltar aún más sus encantos. Cualquier hombre, yo incluido, perdería la cabeza en un santiamén por una mujer así. Y para mi suerte era la cita que me había conseguido mi amigo.

Si así como lo leen todo había sido planeado. Mi amigo tenía casi una semana diciéndome que me veía muy recuperado de la ruptura con mi ex y que ya era hora de que comenzará a salir con algunas chicas y yo siempre le decía que no; pues mayor fue mi asombro cuando la joven me saludo y dijo – que bueno que aceptaste salir conmigo – bueno ahí se me inflo un poco el ego y le dije que para mí era un placer conocerla.

Aunque yo no lo podía creer era cierto algo que una amiga me dijo un mes antes – si continuas con esa actitud ninguna mujer se te resistirá – y yo solo respondí. Eso es mentira pues la que amo se me resiste – eso es porque ella sigue viendo lo que eras no lo que eres – puede ser que tengas razón ahora soy más sociable, no soy un galán ni un Don Juan ni mucho menos, pero tengo sentido del humor, soy bastante espontáneo y en fin soy más divertido que antes.

Con la obra de teatro nos divertimos bastante y la pase muy bien en compañía de mi cita a ciegas al final me toco llevara a cada uno a sus respectivas casas y mi cita fue la última, en el camino ya solos le pregunte que porque eligió salir conmigo; y ella me comento que me había visto una semana atrás en una fiesta y que le gustó mucho mi espontaneidad, lo gracioso que soy y lo lindo que me veía vestido de negro. En ese momento descubrí que la teoría de mi amiga era cierta.

Y diez minutos más tarde descubrí que ella y yo no teníamos nada en común y que yo volver a ver una mujer “hermosa e inteligente” frente a mí era como querer ver la llegada de otro siglo y en ese momento volví a ponerme de mal humor.

Ojala

sábado, 1 de mayo de 2010

0 comentarios  



Ahora, cuando rara vez veo a la luna o a las estrellas se me inundan los ojos de ayer y muchas remembranzas tocan a mi puerta, pienso en los abuelos enseñando siempre esas pequeñas grandes cosas de la vida y para la vida, también pienso en su incapacidad para expresar con palabras el amor que impregnaban con hechos, todos sabemos cuánto amor tenían uno por el otro, aunque rara vez ellos lograban decirlo, de algún modo mis padres siguen ese patrón de conducta aunque no con el alto grado de los abuelos.

Ahora, cuando he dejado de disfrutar los pequeños detalles de esta vida me doy cuenta que hace tiempo no canto, que no escribo y pensé en Séneca cuando escribió en sus epístolas morales “…morimos todos los días, porque todos los días perdemos parte de nuestra vida.”Y tal vez; he perdido de esa tolerancia que tanto falta en el mundo, parte de ese razonamiento que nos convierte en seres pensantes y coherentes, lo cual ayuda a escaparse del montón.

Ahora, que me miro al espejo y veo un rostro envejecido con un toque de madurez y jovialidad, no soy adolescente, no soy joven, no soy viejo…soy hombre, soy yo y Dios me ha mirado aun antes de nacer y he caminado, solo él sabe cuánto. De mis sueños, ahora puedo decir que tengo migajas y sé con certeza que un día Dios me concederá un banquete de sueños. Ahora el camino es escabroso, sembrando entre piedras de conciencias y corazones de espinos, las fuerzas desmayan porque el camino es cuesta arriba, con pasos llenos de temores infundados guardando la esperanza de una forma minima porque es importante para avanzar y seguir adelante todo depende de Dios, de cuando sea su tiempo. Ojala sea mañana…

Attm:
Lino Alexander Herrera Walker’s.