jueves, 26 de septiembre de 2013

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La Muerte que me dio Vida.



La ame de tantas maneras y ninguna la enamoro que hoy solo queda odio y rencor en mi corazón.

Odio, a todo aquello que un dia soñe realizar a tu lado y no fue.

Rencor, al destino que te alejo de mi, dándome una excusa torpe y malograda por otros que al igual que tu mienten disque por no herir.

dejaste de dormir para que ni siquiera entrara en tus sueños y cerraste tus ojos para que no me reflejara en tu mirada
y asi como el dia termina en oscuridad, el error en arrepentimiento y la vida en muerte. Asi termino yo. en un lugar oscuro, arrepentido y deseando morir.

Y aunque la verdad sea amenazada por la mentira, de que el tiempo todo lo cura hoy prefiero el caos a palabras cubiertas de seda que golpean como látigos de cuero.

Hoy podría por dignidad o orgullo llenar mi boca de palabras como, he aprendido de mis errores o aquello que me hizo daño ya no me hace sufrir y peor aun decir que ya no te amo. pero seria convertirme en ti, en un mentiroso mas que arrastra una cruz que ningún cireneo me ayudaría a cargar.

Hoy la prisa me retrasa porque no es tan sencillo desear que llegue como esperar su llegada y con el corazón sediento de sangre, esa sangre que ya a el no llega, porque tu te has encargado de que el solo sístole para mantenerme ahogado en la desgracia.

Aunque creia que tus manos y tu manto me darían calor, ahora comprendo que lo que sentías no era amor, era curiosidad, era el deseo de sentirte amada por alguien y yo fui ese torpe que mordió el anzuelo una y otra vez hasta ver mis labios sangrar tan solo para que me curaras con un beso.

Desear que llegara fue lo mejor que me ha pasado en esta puta vida, que solo le da placer a aquellos que pagan por el yo ya pague y esa desgraciada me ha enviado a la muerte, pensando que yo correría como niño asustado.

La tengo en frente y de mis boca solo salen insultos por su tardanza por haberme dejado en este mundo de mierda, sufriendo cuando mi lugar desde el dia en que te perdí era a su lado y sin embargo ella me escucha durante varios minutos como buscando las palabras mas acertadas.

Acerca su Oz a mi boca y yo feliz creyendo que me decapitara y que al fin terminara mi sufrimiento. pero solo lo hace para silenciar mis labios y que yo escuche con atención sus palabras.

Ella abre lenta mente su boca y mi sangre se hiela como si se llevase mi ultimo suspiro y con voz aguda y pausada me dice.

(El dolor que sientes hoy, mañana puede terminar, pero lo que deseas a mi lado se llama MUERTE y es por la eternidad)......

Prologo: La Muerte que me dio Vida
Autor: Luis Tejeda
Edición: 2013